En realidad estas medidas ya llevan un tiempo entre nosotros, por lo que mas bien seria un recordatorio de las mismas. Todo viaje de vacaciones, mas allá de que dure 2 días, 2 semanas, 2 meses o lo que sea, estuvo en nuestra mente mucho antes de que se llevara a cabo. Todo ese proceso de planeación y planificación es tan importante como el viaje en si. Es así que dentro de esta etapa también debemos contar el hecho de que llevar en nuestro equipaje y que no, cuantas maletas llevar, cuanta ropa llevar, entre otras cosas. Esto puede parecer algo simple pero no lo es tanto, si estamos por viajar internacionalmente. Generalmente, al armar nuestro equipaje hacemos planes de una muda por día, aproximadamente, y lo cierto es que aunque en la teoría lo planifiquemos de esa forma, luego la practica dirá que rara vez usamos cerca de la mitad de toda la ropa que llevamos para nuestros viajes. Igualmente con el pasar de los viajes, cada quien ya empieza a conocer sus “modos de viaje”, y va optimizando su “armado de equipajes”.
Igualmente siempre antes de empezar a armar nada, es necesario saber con cuanto espacio disponemos, es por ello que al momento de comprar nuestro boleto de avión debemos consultar, ya sea con la compañía aérea o con el agente de viajes, acerca de esto. Las compañías aéreas por lo general manejan 2 tipos de conceptos; unas, manejan el concepto por Kilos (donde permiten llevar gratis una maleta de 23 Kg.); otras, prefieren el Piece Concept (PC – Concepto por Piezas), donde se autoriza a cada pasajero a llevar 2 maletas de 23 Kg. cada una, generalmente. Independiente de la modalidad, ambas coinciden en lo que SI se puede llevar y en lo que NO. Es obvio que los eventos de 11S (Septiembre 11), y los acontecidos en Agosto 2006 en el aeropuerto de Heathrow (Londres, Inglaterra), han ido cambiando la conducta de los viajeros en estos aspectos. Es por ello que, se han ido modificado y actualizando los ítems que se pueden llevar en el equipaje de mano (Carry On – Equipaje en la Cabina de Pasajeros) y los que no. Según las ultimas normas, solo se podrá llevar en el bulto de mano, liquido, gel, pasta, o crema, siempre y cuando esté en botellas de menos de 3oz./100ml, y todas juntas quepan en una bolsa transparente de plástico “zip-lock” de capacidad de 1 litro. Esta bolsita deberá de presentarse por separado al momento de pasar el punto de seguridad. Si los elementos que quisiéramos llevar fueran más grandes, entonces la única opción para llevarlos seria en las maletas tradicionales que se documentan y van en la bodega del avión.
En junio de este año, 2015, la Asociación Internacional del Transporte Aéreo, IATA, ha anunciado una nueva iniciativa que ha bautizado como “IATA OK”, y consiste en un sello que certificará que el equipaje, independientemente de cuál sea la aerolínea en la que se va a utilizar, cumple un estándar mundial consistente en que su volumen no supera los 55 por 35 por 20 centímetros. IATA asegura que las dimensiones se han calculado para hacer posible que en cualquier avión con capacidad para más de 120 viajeros todos y cada uno de ellos dispongan de espacio bastante en la cabina como para encajar sus maletas, sin necesidad de que la tripulación tenga que repartir por diferentes rincones aquellas de los que han embarcado más tarde.
Independientemente de lo que podamos pensar acerca de todas estas medidas; todas ellas son finalmente reglas que hay que cumplir para poder llevar nuestros efectos personales en el viaje.